Estamos empezando el mes de Sagitario y sentimos el cambio de polaridad: de la profundidad y densidad del agua de Escorpio, al fuego muy encendido e intenso de Sagitario. Dos extremos opuestos y complementarios a la vez.
De Escorpio, regido por Marte, sefiráh de Gevuráh, el rigor y la limitación, pasamos a Sagitario, regido por Júpiter, sefiráh de Jesed, el dar y el amor.
Hay 4 energías que se fortalecen este mes:
Valentía
Sabiduría
Vanidad
Un tipo de amor
De acuerdo a la astrología occidental se asocia a Sagitario al centauro con la flecha. En hebreo en cambio, es Keshet, que significa “arco”, y no arquero. Se asocia un arco como el “arcoiris”. Y representa el pacto de paz entre el Creador y su Creación, una promesa, como lo fué en la historia de Noáh que nos cuenta la Toráh.
Es un buen mes para decidirte a sellar “pactos” trascendentes o a no continuar en uno. También es bueno para comprometerte (contratos, cambios con nosotros mismos, hábitos, pedir matrimonio,etc.) Tomar compromisos a través de pactos.
Firma un compromiso contigo mismo. La energía del mes te ayudará a cumplirlo:
Yo (tu nombre), firmo este pacto en el cual me comprometo conmigo mismo, con el Creador y con el Universo a hacer (tu decisión o compromiso) por (el tiempo en que lo realizarás).
Este mes también despierta el “coraje” dentro de ti mismo para poder hacer lo que no has sido capaz de hacer, decir, o dejar de decir o hacer. Para pedir lo que realmente quieres.
“Valentía”. Anota lo que no te has atrevido a hacer y hazlo este mes. Esto te ayudará a expandir lo que haya dentro de ti, en tu mente (Neshamáh), en tu corazón (Ruaj), y en tu cuerpo (Nefesh). Asegurate de que lo que haya en esos 3 niveles sea positivo y de estar vibrando en lo que quieras para ti, para que se expanda en tu vida.
Con el gran poder de la “atención”, fortalecerás este milagro. Aquello a lo que le pones atención se expande, y a lo que se lo quitas se debilita.
A veces es tanta la carencia de atención en lo que deseas, que llega y no te das cuenta de que llegó porque estás enfocado sólo en lo que no tienes.
El mes de Kislev es llamado también Jodesh Hanisim, “el mes de los milagros”, porque en este mes ocurrió uno de los dos grandes milagros que se relatan en los textos sagrados y de los cuales ahora hay festividades: Januka y Purim.
Este mes tiene el poder de crear la materia prima para los milagros. El Creador no interviene en la consecución de estos milagros, lo haces tú dentro de ti mismo. Es la energía de Júpiter que te ayuda a expandir desde adentro, pero debes tú primero desafiar tus miedos.
Para manifestar la energía de Janukáh, debes avanzar a pesar del miedo, desafiarte, y entonces darás cabida a la Luz de los milagros. Y lo que era antes, ya no volverá a hacer.
Deja el miedo atrás y avanza, y te encontrarás con una realidad que aún no existe y todo lo que existe hasta hoy dejará de ser.
Debes ser valiente para enfrentar a esa persona que no conoces aún. ¿Estás dispuesto a aceptar y afrontar a este nuevo tú y su realidad?. Yo si estoy dispuesta, ¿y tu?.
Por Dany Nessi
Tomado de la conexión de Luna Nueva de Fundación Kabbalife Chile (https://kabbalife.com/)